viernes, 22 de mayo de 2015

Equipo Baja SAE USB viajará a pesar de obstáculos económicos



 Los jóvenes representarán al país en Oregon superando los problemas para la construcción del prototipo

Durante 10 años, la Universidad Simón Bolívar ha enviado grupos de jóvenes de distintas carreras  a representar a Venezuela en la competencia Baja SAE, celebrada anualmente desde 1976 en Estados Unidos. Sin embargo, que la situación del país en la actualidad no es la misma que hace 10 años no es secreto para nadie. Con la inflación más elevada de América Latina y dificultades para la importación de tecnología, que debe pagarse en dólares, construir el carro fue un reto para los estudiantes.
  
Participar en el concurso implicó la construcción desde cero de un prototipo de carro todo-terreno, para competir contra otras 100 universidades de todo el mundo por un premio de 5000 $ y la oportunidad de ser contratado por importantes empresas transnacionales como Toyota, Chevrolet, entre otras.

Por ello, al iniciar el proyecto en septiembre del año pasado se realizó un ambicioso diseño que buscaba ligereza y poder dinámico. Se estudiaron los prototipos de años anteriores y se mejoraron aspectos como la suspensión, que pasó de resorte a aire, se instaló un freno más ergonómico para favorecer la aceleración, y fue actualizado por completo el sistema electrónico, que por primera vez funciona sin fallas y que cuenta con una aplicación que no tiene ninguna otra universidad de la competencia, la cual les permite conocer el estado del carro a distancia. 

La inflación cerró en 68,5% en 2014 según cifras del Banco Central de Venezuela, y economistas como Jesús Casique y Pedro Palma afirman que superará los tres dígitos en 2015. Además, la tecnología de la que depende un proyecto como este es importada y el dólar SIMADI tiene un costo actual de 199,84 BsF, mientras que el dólar paralelo ronda los 380 BsF, y ya en noviembre de 2014 estaba en 110 BsF.

Este desequilibrio económico llevó a los Usebistas a solicitar el apoyo de organismos como PDVSA, las alcaldías de Chacao, Baruta, Sucre y el Hatillo, Mercantil Seguros, La Patilla, entre otros, que patrocinaron el vehículo y que les permitieron adquirir conectores llamados Molex, resistentes al barro y la humedad, y un cable central que une toda la electrónica y reduce el peso que el cableado extra le daría, para mayor ligereza, así como otros aparatos.    

Además, el equipo realizó “potazos” en algunas zonas de Caracas como Altamira y Chacao, donde pedían colaboración económica a los conductores para apoyar el proyecto.

Los 20 estudiantes, de carreras tan diversas como Biología, Arquitectura, Ingeniería Mecánica y Electrónica, se encargaron del proyecto prácticamente solos, dividiéndose en departamentos para distribuir tanto las labores de diseño y construcción como administrativas, y ellos mismos costearon sus pasajes.


A pesar de todas las dificultades, el viaje será una gran oportunidad para los jóvenes de ser vistos por los caza-talentos que suelen asistir al evento y ser captados por ellos, y de traer gran prestigio a Venezuela y la Universidad Simón Bolívar.  

jueves, 14 de mayo de 2015

Equipo Baja SAE USB representará a Venezuela en Oregon


El prototipo todoterreno diseñado por el grupo estudiantil competirá este 26 de mayo en Estados Unidos contra otras 100 universidades de todo el mundo

Un grupo de 20 estudiantes de la Universidad Simón Bolívar, de diversas facultades, viajará este 24 de mayo a Oregon, Estados Unidos, para competir entre el 26 y 29 de mayo con su prototipo de vehículo todo-terreno en el concurso de diseño automotriz Baja SAE, celebrado anualmente desde 1976, y en el que la universidad ha participado desde hace 10 años.

La construcción se inició desde cero en septiembre del año pasado. Para realizar el diseño, se estudiaron los prototipos de años anteriores y se mejoraron aspectos como la suspensión, que pasó de resorte a aire, se instaló un freno más ergonómico para favorecer la aceleración, y fue actualizado por completo el sistema electrónico, que por primera vez funciona sin fallas y que cuenta con una aplicación que no tiene ninguna otra universidad de la competencia, la cual les permite conocer el estado del carro a distancia. 

Todo fue patrocinado por organismos como PDVSA, las alcaldías de Chacao, Baruta, Sucre y el Hatillo, Mercantil Seguros, La Patilla, entre otros, que pagaron por la tecnología, casi toda importada. Esto incluye conectores llamados Molex, resistentes al barro y la humedad, y un cable central que une toda la electrónica y reduce el peso que el cableado extra le daría.   

Los estudiantes, de carreras tan diversas como Biología, Arquitectura, Ingeniería Mecánica y Electrónica, se encargaron del proyecto prácticamente solos, dividiéndose en departamentos para distribuir tanto las labores de diseño y construcción como administrativas.

El prototipo fue enviado hoy a Valencia y de allí viajará a Oregon, donde será ubicado por el personal de Baja SAE antes de la llegada de los jóvenes. 

Unidos Ciclo de Ópera y Festival de Teatro para traernos a Madame Butterfly


Este 24 y 25 de abril Madame Butterfly en la sala José Felix Ribas

Este jueves 23 de abril se llevó a cabo el último ensayo general de la obra Madame Butterfly, enmarcada en el Ciclo de Ópera del Teatro Teresa Carreño y el Festival de Teatro de Caracas. Ambos eventos se unen para traernos dos presentaciones, una el viernes 24 de abril y otra el sábado 25, ambas en la sala José Félix Ribas del Teatro Teresa Carreño.

Madame Butterfly es un clásico operático con música de Giacomo Puccini y letra de  Giuseppe Giacosa y Luigi Illica, estrenado con éxito por primera vez en Brescia, Italia, el 28 de mayo de 1904. Esta vez, José Rafael “Fucho” Pereda trae la pieza a la sala caraqueña, empleando un montaje minimalista, sencillo, que con el juego de luces lilas, naranjas y azules acompaña a los personajes y refleja sus emociones, para hacer énfasis en ellas y de alguna manera pintar los matices que brinda la música de Puccini. La escenografía, con pocas líneas, describe el ambiente asiático de la casa de Pinkerton y Cio Cio San (Butterfly), donde se llevan a cabo las escenas.

Luis Morales Bance, en la dirección de la Orquesta Filarmónica Nacional, realizó pocas pausas para repasar áreas de duda, mientras los actores, a pesar de la falta de aire acondicionado y de estar ataviados con pesados vestuarios, continuaron con la función como si nada, dando muestras de su profesionalismo.   

Los asistentes aplaudieron de pie a la soprano Dorian Lefebre (en el papel de Butterfly) cuando, en la escena segunda, lleva a cabo con éxito la compleja área Un bel dí vedremo, en la que la geisha expresa a Susuki, su criada, el optimismo y a la vez la duda que la embarga sobre el regreso de Pinkerton, su amado, dando la cantante muestras de un amplio registro y gran potencia.

Otro punto central en la presentación fue la aparición de una pareja perteneciente al Ballet del Teresa Carreño, durante el final del segundo acto, mientras Butterfly, su hijo y Susuki duermen en la espera de la llegada del barco de Pinkerton, que con movimientos limpios y delicados parecen reflejar el conflicto interno de la protagonista por la marcha del marín y su extraño regreso. En ese momento, entra por los costados un grupo del Coro de Ópera Teresa Carreño, que con sus cantos representa los ruidos matutinos de Nagasaki, que anuncian el alba.


A pesar de que esta presentación es parte de la programación de cierre del Festival de Teatro de Caracas, el Ciclo de Ópera del Teresa Carreño tiene pautada una obra más, Cavalleria Rusticana, de Pietro Mascagni, para el 30 de abril y el 3 de mayo de este año.